Con el pie derecho

Toco 4 - Boteya 14 1

Solidaridad. Si uno toma el diccionario y buscar el significado de esta palabra, se encuentra con que es la capacidad de actuación de los miembros de un grupo social o colectividad. Esto denota un alto grado de integración y el compromiso total por una causa, lo que implica asumir y compartir por ella beneficios y riesgos. Hecha la salvedad, e ingresando en el analísis del partido de esta tarde podemos sostener que la victoria de Toco fue consecuencia de la solidaridad entre todos: los que estuvieron, los que no estuvieron, los que jugaron, los que alentaron y los que se quedaron sin jugar (párrafo y mención especial para Jimmy y Fefe). Todos fueron partícipes de un triunfo justo, merecido, que ayuda para empezar el campeonato con una sonrisa y con la ilusión a flor de piel.



Golpeado por la dura derrota en el último partido de los amistosos, Toco salió a la cancha con la firme intención de cambiar la imagen dejada y llevarse los dos puntos. Desde el primer minuto, se pudo aplicar parte de lo que siempre pensamos en la teoría: orden, presión, juego y agresividad tanto como para recuperar la pelota, como para atacar. Fueron 15/20 minutos en dónde se vio un equipo decidido, confiado, que se llevó por delante a un rival que venía con buenos pergaminos. Fue reconfortante ver que el equipo aplicó durante ese lapso, lo que se había hablado antes del encuentro: jugar decidamente en campo contrario, presionando desde los delanteros, con una defensa adelantada, para ahogar y no dejar reaccionar al rival. Todo redondo, todo perfecto y la frutilla del postre fue el gol que abrió el marcador para los rojinegros: anticipo de Luis como lateral izquierdo, devolución de Diego con un taco genial, desborde, centro, el Loro que la baja al medio del área y Diego, que había arrancado la jugada, estaba, como siempre, en el lugar indicado para mandar la pelota al fondo de la red.

El comienzo fulgurante y la ventaja obtenida, serenó un poco a los jugadores rojinegros y el partido comenzó a transitar en el camino de la paridad. Toco ya no era tan preciso como en los primeros minutos y la presión había comenzado a menguar. La imposibilidad de poder manejar la pelota con criterio, permitió la reaccion de Botella XIV, que empezó a preocupar a la última línea toquense, sobre todo a partir de un delantero pelado que era sin dudas su jugador más peligroso. Avisó el calvo atacante luego de un gran desborde por derecha y minutos más tarde confirmó lo que venía insinuando, guapeando una pelota que parecía perdida, superando a tres de los cuatro defensores y definiendo con un puntazo ante la salida del Gordo. El empate daba lugar al comienzo de otro partido. Toco debía recuperarse del golpe recibido y volver a mostrar las credenciales exhibidas durante el primer lapso del partido. La suerte y la contundencia estuvieron del lado del equipo de Miki, y en una de las primeras aproximaciones al arco rival luego del empate transitorio, un buen centro de Diego pasó por toda el área sin que nadie la toque, desconcentrando al arquero rival y decretando el 2-1 parcial con el que finalizó el primer tiempo.

Si lo del primer tiempo había sido positivo, podemos decir que en el segundo período Toco mostró su mejor versión. Luego de un comienzo en dónde la paridad persistía, el ingreso de Matías Namad fue clave para la remontada del equipo y para poder cerrar el partido. El cambio fue una movida arriesgada de Miki, reemplazar la dinámica de Pachu por el juego pausado del trovador latino para contener los ataques rivales parecía ir en contra a los principios fundamentales del fútbol, pero paradógicamente Toco comenzó a manejar más y mejor la pelota, sumado a que su rival había comenzado a desordenarse, resultó ser definitorio en el resultado. Junior y Guille tomaron todos los rebotes, Matías Namad y Koke agarraron la pelota, y tanto Loro como Diego se hicieron un festín con la defensa rival. Primero avisó Diego luego de una gran jugada colectiva, hasta que finalmente el diminuto goleador coronó su tercer grito en la tarde, al recibir un buen pase de Matías y definir con tranquiliad ante un arquero que le dio muchas facilidades. De ahí en más, Toco se dedicó a tener la pelota, a manejarla con criterio. Incluso con 10 hombres (tras la expulsión del Pony) la victoria no se vio amenazada en ningún momento, gracias a una defensa que mostró seguridad en todo momento. La frutilla del postre fue el gol del Loro tras un centro bombeado de Tute que terminó de redondear el 4-1 final.

El final del partido mostró la alegría de la numerosa parcialidad rojinegra que apoyó al equipo en el inicio de un nuevo campeonato. Se empezó con el pie derecho, dando una imagen positiva en comparación al último partido de la pretemporada y con la expectativa de que los buenos augurios que hay, se traduzcan en una buena campaña. Hay mucho para mejorar todavía, falta encontrar regularidad y aumentar la confianza, pero comenzar con un triunfo siempre es esperanzador. Unidos, con actitud, solidaridad y compromiso, los pilares de este sueño.

Goles
1-0. Diego. Gran desborde de Luis por izquierda, centro al segundo palo a la cabeza del Loro, quien la baja al medio, buscando la entrada de Diego quien cabeceó franco hacia la red.
1-1. Saque de arco muy largo, dudas defensivas y un delantero picante que aprovecha la distracción para guapear, ganar y marcar el empate.
2-1. Diego. Desde la punta derecha, centro al corazón de área, todos van a buscarlas, nadie la toca y la pelota se mete al fondo de la red ante la atónita mirada de todo el mundo.
3-1. Diego. Enganche y pausa de Matías Namad, pelota entrelíneas para el petiso maravilla que baja la pelota, se toma su tiempo y marca su primer hat-trick del campeonato.
4-1. Loro. Centro de Tute desde la derecha bien pasado al segundo palo, el astro alemán se elevó en las alturas para meter un frentazo bombeado que se metió por arriba del arquero.

Puntajes.

Gordo. 6. Sobrio. Casi no fue exigido en el partido, pero siempre que se lo llamó a intervenir estuvo atinado. Se lo vio muy metido y concentrado ordenando a los compañeros de defensa.

Tute. 6. Destacado. Entendió su rol de "lateral ofensivo", mostrandose como salida por la banda derecha, pero no olvidandose de marcar, sobre todo cuando el pelado fue por su lado. En el segundo tiempo parecía un wing derecho y atacó mucho por su sector.

Muro. 7. Firme. Siempre bien parado, escalonado y ordenado, fue uno de los valuartes del equipo en el segundo tiempo, cuando los rivales intentaron descontar sacando todo por arriba y por abajo.

Angel. 6. Invulnerable. Bien en la marca, entendiendo su misión de ir a presionar a la espaldas de Guille para evitar que el equipo quede tan expuesto a la hora de defender. Mejoró mucho en el segundo tiempo.

Luis. 6. Aplicado. Volvió a la titularidad luego de un verano que lo tuvo más en la enfermería que en el campo de juego. Mostró la vehemencia y la velocidad de siempre, pasando al ataque con criterio y siendo partícipe activo del primer gol.

Junior. 8. Dueño. Dejando del lado al animal de Diego (con el cual cuando tiene una tarde inspirada casi no se puede competir), Junior fue el punto más alto del equipo. Dinámico, inteligente, solidario, preciso, terminó redondeando un partido superlativo, mostrando que si se juega con el corazón en la mano, el alma en la cancha y la cabeza bien fría, cuestiones tacticas, técnicas o emocionales quedan en segundo plano.

Guille. 7. Neurálgico. De manor a mayor. Comenzó algo desubicado e impreciso, pero una vez que se acomodó en el medio y entendió lo que el partido pedía de El resultó ser fundamental. Quitó, relevó, distribuyó con criterio y se hizo fuerte en la zona media junto con su ladero Junior, dominando por completo el partido en el segundo tiempo.

Pachu. 5. Presuroso. De mayor a menor. Arrancó como para comerse la cancha por izquierda. Buenas intervenciones junto con Koke, Loro, Luis o cualquier ser humano que pase cerca de su sector con intenciones de jugar al futbol. Apuntaló a Luis en la jugada del gol. Desapareció de la zona activa del partido cuando Toco se replegó, quedando lejos de su zona de influencia. Salió reemplazado llevandose una sentida ovación por parte de la gente.

Koke. 6. Implicado. Como siempre, intentó hacerse manija y eje del equipo en posición ofensiva. Inteligente para moverse a espaldas de los mediocampistas rivales, participó bastante en la gestación de las jugadas sobre todo en los primeros minutos del partido. Le faltó estar más fino en algunas asistencias que podían haber puesto a los delanteros cara a cara con el arquero contrario. Igualmente, cumplió con creces. Salió extenuado a mediados del Segundo Tiempo.

Loro. 7. Atinado. A pesar de que su condición física no es la mejor (producto de su trabajo esclavo en una importante automotriz europea) sus condiciones técnicas lo hacen sobresalir de la media. Jugó como delantero, sin ser un referente de área, pero estando cerca de las zonas dónde los partidos se definen y fue relevante: inteligente para bajar la pelota de cabeza y asistir a Diego en el primer gol, sagaz para meter un frentazo exacto y lograr su primer gol en el campeonato.

Diego. 10. Inspiración. Tal como sentencié más arriba, cuando este pequeño duendecillo está en una tarde inspirada como la del sábado, hay muy poco para hacer. Tanto para los rivales (que deberían sacarle una foto antes del partido para conocerle la cara), como para aquellos compañeros que se esfuerzan por ser el mejor jugador del equipo, como para los cronistas a la hora de buscar los artífices del triunfo. Lo suyo es así, letal. Tres goles, una o dos apiladas a máxima velocidad que hace delirar a los presentes, y nada más. Como si fuera poco.

Matías. 7. Vital. A mi criterio, acertadísima decisión del entrenador, en confiar en un jugador de pausa y buen manejo de pelota para contrarrestar la busqueda del equipo rival de llegar a la igualdad. Una vez que se acomodó y la pelota comenzó a pasar por sus pies, el partido llegó a su fin. Siempre con al decisión correcta, buscando a Diego, asociandose con el Loro, mostrandose y tocando con criterio. Vale lo suyo de venir de callado, de a poco y mostrando que es un jugador con mucha clase a tener en cuenta.

Eber. 4. Desacertado. Entró a la cancha por la lesión de Koke para ayudar en la marca y colaborar en la tenencia de la pelota. Y cuando había tenido dos o tres participaciones positivas que hacían esperanzador su ingreso, se fue expulsado a mi criterio de manera injusta.

Abuelo. 5. Tenaz. Ingresó en lugar de Diego para acompañar al Loro en ataque. Tuvo algunas participaciones interesantes presionando en la salida de los rivales y ganando algunas pelotas. Lamentablemente para El, a poco de ingresar el equipo se quedó con 10 hombres y tuvo que sacrificarse tomando posiciones defensivas y quedando lejos del arco. Se lo vio jugando más con los brazos y haciendose más fuerte en el cuerpo a cuerpo.

Miki. 6. Poco para decir de los movimientos del director técnico. Despues de mucho tiempo puedo nombrar correctamente a Koke (Keko) en la formación incial pero se despachó con un "Pitu" (en lugar de Tute). Vivió el partido con ganas. En el segundo tiempo cambió de lado, quedando muy lejos de los suplentes, lo que llevó a algunos malentendidos a la hora de hacer los cambios. Acertó con el ingreso de Matías Namad.


PREMIO GIBOR, EL REY DEL MAL.
Eber. La gente estaba esperanzada por su ingreso en el partido, para ver si podía mostrar el nivel mostrado en la pretemporada. Ingresó, hizo dos o tres cosas buenas y después llegó a destiempo castigando de forma desmedida al pelado rival. Expulsión y las ganas de todos de verlo más en cancha.













PREMIO GO - IN -PAK, a los coreanos.
Cobany, Lavezi, Nene y otros. Fieles seguidores del equipo, dos de los máximos referentes de la barra y el histórico lateral derecho, compartieron juntos gran parte del partido. Se los vio compartiendo conversaciones y actividades muy amenas y divertidas. Es bueno que jugadores e hinchas convivan en la cordialidad.













PREMIO ENRIQUE ORCHESSI.
Junior. Así como este legendaro luchador quedó siempre bajo la sombra del Ancho Peucelle, Junior quedó bajo la sombra de la gran tarde de Diego, pero sin embargo vale la pena la distinción. Un partidazo desde todos los ángulos: con la pelota en los pies, en la marca, en la presión, en la actitud, en el despliegue, contagiando y alentando siempre a sus compañeros. El Capitán en un nível altísimo.











PREMIO ESPECIAL. HOMBRE ARAÑA BOSTERO.
Jimmy y Fefe. Por cuestiones del partido y olvidos del entrenador, les tocó quedar afuera y no ingresar en el partido. Miki se disculpó en ronda de prensa, aceptando que pensó que había hecho todos los cambios y que tanto Jimmy como Fefe eran parte de los alocados espectadores. A pesar de ello, hay que destacar la buena onda y la solidaridad de ambos, apoyando al equipo. En nombre de jugadores, cuerpo técnico y cronista. Muchas Gracias!.