27 de septiembre de 2015

4ta fecha clausura 2015: Toco 0 - Tifon 6

Otro partido, otra goleada en contra. Ya resultaría innecesario hacer cualquier tipo de análisis o arribar a cualquier conclusión, la única verdad es la realidad: 14 goles en contra en 3 partidos y la sensación de que el equipo está totalmente desubicado en una Liga la cual es cada día más competitiva, con mejores (y más jóvenes) equipos. Ante esta realidad, hay que sumar de que Toco no sólo no ha logrado superarse, sino que ha involucionado: sus jugadores han bajado su nivel individual, sumado a que en las últimas fechas se han registrado algunas bajas fundamentales, difíciles de reenplazar.

El partido, por lo tanto, carece de todo análisis. Toco aguantó exactamente 30 minutos cuando Tifon hizo una jugada combinando inteligencia, velocidad y precisión, decretando la apertura del marcador. De esos 30 minutos podemos rescatar el empeño, pero fundamentalmente el cambio que el equipo hizo a los 27 del primer tiempo con el objetivo de "enfriar" el partido.

Poco más para agregar. El campeonato nos queda grande. Un error de La Comisión, quizás, por no haberse anticipado a la situación, buscando soluciones como ser un torneo menos complejo que este. Pero ya es tarde para lamentarse; sólo queda seguir adelante, tratar de sacar la mayor cantidad de puntos, lograr el objetivo de dejar a Toco en la elite y definir el año que viene que se hace con el equipo.

Puntajes:

Gordo. 1. Desde aquí solamente brindarle compasión y animo, no debe ser fácil ir a jugar y comerse de a 4 goles o más todos los partidos. Arriba el animo.

Jimmy. 1. Para su juventud y sus ganas de llevarse el mundo por delante debe ser complicado aceptar la realidad de jugar en un equipo que ofrece poco. El fútbol siempre da revancha.

Tute. 1. De a poco viene volviendo a jugar pero en esta reaparición, la performance del equipo no lo han ayudado.

Gonza. 1. Le tocó sufrir ante un delantero joven y pujante. Ni siquiera se pudo descargar con un teledirigido a la rodilla.

Nico. 1. A pesar de ser el más joven de la brigada, no puede contagiar su juventud al resto del equipo. Hace lo que puede.

Abuelo. 1. El empeño y las ganas de siempre. Como a todo el equipo, le cuesta individualmente y lo colectivo no lo ayuda.

Guille. 1. Una sombra del volante central que supo ser. Quemando sus últimos cartuchos como jugador.

Tincho. 1. A pesar de pedir las pelotas e intentar darle un destino seguro, se lo nota como a otra velocidad y le cuesta hacer pie ante rivales mas jóvenes.

Pablo. 1. El aluvión de fútbol y juventud que desplegaron los rivales fueron demasiado. No hizo pie al igual que todos sus compañeros.

Kiko. 1. No sólo que no pudo seguir con su racha goleadora, sino que pocas veces pudo desnivelar en ningún momento. Tuvo una chance clara en el segundo tiempo pero no pudo darle fuerza al cabezazo.

Charly. 1. Muy pocas pinceladas de su talento. No logra crear, mostrar su talento y darle alegrías a la gente. Individualmente esta bajo y el equipo no lo acompaña.

Tio. 1. Seguramente cuando firmó su incorporación al Toco pensó en otra realidad: partidos ganados, goleadas a favor, orgullo de victorias épicas. Nada de esto ha pasado hasta ahora.

21 de septiembre de 2015

Clausura 2015: Toco 1 - Central Ezeiza 4

Poco más para agregar en la segunda derrota consecutiva de Toco. El resultado habla por sí solo. A pesar de los esfuerzos, de las fatalidades, de la poca fortuna para sacar adelante un partido que se hizo cuesta arriba desde el minuto 1, nuevamente lo del equipo fue muy pobre. Desde la concentración, desde la actitud, desde lo futbolístico, desde lo individual y desde lo colectivo, Toco fue superado por Central Ezeiza, un equipo no muy vistoso pero con un gran sentido de lo colectivo y una individualidad (el pelado) que está muy por encima del resto. Con eso, y mucho oportunismo, logró llevarse una goleada muy festejada en el seno de su parcialidad.

Muchas bajas presentaba Toco para afrontar un partido “de 6 puntos”, entendiendo a Central Ezeiza como un rival directo en esto de la lucha por mantener la categoría. La lesión de Junior sumado a la ausencia de “la armada de Flores” por compromisos personales, llevaron a la más absoluta improvisación: Junior en el banquillo, Leo de zaguero y el resto intentando maquillar las ausencias. Muy difícil fue el desarrollo del encuentro, sobre todo, a partir del minuto 1 de juego, cuando Central Ezeiza logró ponerse en ventaja, luego de una serie de errores defensivos combinados y fatales.

Toco sintió el impacto e intentó acercarse al arco rival, aunque sin criterio. Los delanteros jugaban muy lejos del golero rival, los mediocampistas no funcionaban ni para defender ni para el armado de juego, lo cual hacía imposible avanzar en el campo. El único argumento del equipo en ataque eran las pelotas paradas. Cada saque de esquina o tiro libre cercano al arco rival eran como un oasis en el desierto. En una de todas esas jugadas, Kiko capitalizó un buen envío de Leo y con un buen cabezazo decretó el empate transitoria, que le daba vida a los rojinegros para afrontar el complemento a toda fuerza.

Pero, nuevamente, las desconcentraciones y la seguidilla de errores defensivos, llevaron a Central Ezeiza a encontrarse nuevamente en ventaja casi sin proponérselo al comienzo del segundo tiempo: un desborde a toda velocidad por el franco izquierdo Toquense encontró solito y sólo al 9 rival dentro del área, quién con un toque suave y esquinado, dejó sin chances al Gordo. 1-2 y a remontarla de nuevo.

El destino quiso darle a Toco una nueva oportunidad y, en una acción de una torpeza alarmante, un defensor rival le cometió un infantil penal a Kiko, el hombre hasta esa altura más determinante de los rojinegros. El mismo Kiko tomó la responsabilidad pero su ejecución, esta vez, no fue certera: el golero rival no se dejó desconcentrar con su suave movimiento de caderas y contuvo el penal con suma astucia. Para colmo, en la jugada subsiguiente, el árbitro consideró penal una mano de Jimmy y el Nro. 7 rival, cambió por gol con una excelente ejecución. Detalles, simplemente detalles, que a este nivel se sufren con puntos y derrotas.

Con el 1-3 el partido quedó prácticamente definido. Aun cuando Central Ezeiza se quedó con 9 hombres producto de su indisciplina, Toco no supo cómo cambiar el rumbo del partido. Desorden, poca claridad y falta de contundencia fueron los (anti) argumentos del equipo para buscar el empate.

No hay tiempo para lamentos y tampoco hay material de sobra como para deprimirse. Solamente queda tomar nota de los errores (que se repiten partido tras partido) para intentar resolverlos, de forma de frenar la “hemorragia de los 4 goles en contra”, salir de la banquina y volver a transitar el camino del fútbol.

Puntajes

Gordo. 4. Dubitativo, sin reacción, como derrotado antes del inicio del partido. Sin su mejor forma física, no ofrece la seguridad que brinda habitualmente.

Jimmy. 4. Error puntual en el primer gol, tras una imprecisión en la salida. Penal discutible en el tercer tanto rival. Poco positivo para marcar.

Leo. 4. En la primer jugada del partido se mostró algo liviano ante el ímpetu del pelado rival. Luego de ese error mejoró un poco, pero sobre el final le jugó en contra la larga inactividad.
Gonza. 4. Un duelo especial con el pelado rival. Ganó y perdió por partes iguales, pero en la jugada del primer y tercer gol, no mostró la presencia habitual en el área propia.

Ema. 4. Desbordado permanetemente por su sector. Padeció el 2x1 en contra durante todo el partido y nunca logró acomodarse en la cancha.

Abuelo. 4. No aportó marca, ni juego. Le costó parar la pelota y apostó siempre al pase largo, sin darle pausa al equipo o intentar jugar con criterio.

Guille. 4. Deambuló en la cancha sin ton ni son. No aportó marca, ni despliegue, ni criterio para distribuir la pelota. Se lo vio superado por los rivales y la situación. Debe mejorar.

Nico. 4. Algunos destellos de su categoría, aunque no pudo hacer pie en la mitad de la cancha.

Kiko. 5. A pesar de jugar algo desordenado y fallar en el retroceso en algunas jugadas, fue el jugador más determinante del ataque. Metió el gol, le cometieron un penal, el cual no pudo convertir en gol. Luego de esa jugada se desinfló anímica y futbolísticamente.

Mauro. 4. Perdió repetidamente ante los defensores rivales. Nunca encontró su lugar en la cancha, no aguantó la pelota, no descargó con precisión para la llegada de los volantes ni pudo imponer su potencia.

Charly. 4. Muy poco de su repertorio. Sin compañía en el juego, no encontró su posición para hacer valer su habilidad y su talento. En el complemento, quiso mostrar algo de rebeldía pero no alcanzó.

Tío. 5. Aún con sus limitaciones, puso un poco de ganas y empeño, intentando contagiar a sus compañeros que parecían momias. No negocia su actitud.

Tute. 4. A pesar de no estar al 100% físicamente intentó ser salida por izquierda. Algunas buenas jugadas, mezcladas con otras no tan buenas. En el cuarto gol rival, descuidó su posición, en una pésima cobertura defensiva.

Leo Mayer. 5. Ingresó con el partido ya definido, y aunque preocupó con su movilidad y con algún que otro desborde, estuvo lejos de preocupar a los defensores rivales.


Junior. 5. Nada que reprocharle al técnico interino. Intentó contagiar con su habitual charla motivacional y mostrando su compromiso con al causa, pero sus jugadores no trasmitieron nada de nada.

16 de septiembre de 2015

Clausura 2015 2da fecha: Toco 1 - Zafados 4

Dura derrota del equipo en la segunda fecha del Torneo. Luego de un comienzo promisorio, el equipo se veía la cara contra un equipo nuevo, que ostentaba estar en las semifinales de la Copa Champions que se jugó durante el receso invernal.

Si bien el equipo comenzó ganando al minuto gracias a un penal ejecutado por Kiko (el nuevo Penalty Kicker del equipo), esta vez nos tocó jugar contra un equipo que además de tener muy buenos jugadores (3 o 4 que podrían estar jugando en el Barcelona o en el Real Madrid) hizo pesar los 10 años de diferencia con nuestros veteranos (pero no baqueteados) jugadores. Además, el equipo tuvo algunos errores individuales que inclinaron la balance hacia Zafados, que en 30 minutos no sólo dio vuelta el partido, sino que demostró todo su poderío marcando 4 goles y definiendo el partido. El segundo tiempo es una linda anécdota.

Nada para reprocharse. A dar vuelta la página lo más rápido que se pueda, entendiendo que ante equipos jóvenes y buenos, el equipo tendrá que hacer el "partido perfecto" para poder sumar de a 3 o de a 1. Esta vez la perfección no estuvo al alcance y el resultado fue contundente.

Formación: 
Gordo; Jimmy, Fabri, Gonza y Ema; Martín, Pablo, Nico y Kiko; Charly y Sapo. Luego ingresaron: Abuelo y Tío.
DT: Leo

Goles: 1-0. Kiko de Penal.
(Luego, se vino el derrumbe)


6 de septiembre de 2015

Clausura 2015: Toco 2 - Empetrolados 1

Torneo Nuevo, Vida Nueva.

Desde el profundo de mis entrañas pensaba que el post de la derrota Vs. La Cortada iba a ser el último de mi vida. Ocupaciones, preocupaciones, debilidad mental, desconsideración, fueron algunos de los motivos que me habían llevado a dejar de escribir y tratar compartir con todo el mundo (la última vez fueron 27 personas las que ingresaron al sitio) las sensaciones que nos regala sábado tras sábado este espacio maravilloso que se llama Toco y me Voy. Pero en estos 3 meses, fue mucha el agua que pasó debajo del puente y un poco gracias a la insistencia de mis amigos (que también forman parte del equipo) y otro poco por las ganas de dejar reflejada nuestra historia en este espacio, es que decidí volver al ruedo.

Al mismo tiempo y casi por arte de magia, también se percibió un cambio dentro del equipo. El Apertura terminó sin pena ni gloria. De hecho, creo que no volvimos a sumar de a tres en lo que restaba de ese torneo, pero en el receso algo maravilloso sucedió. Algo difícil de explicar con palabras y con hechos concretos: un velo de mística recorrió los corazones de cada uno de los integrantes del plantel, lo que nos llevó a volver a creer en nosotros y en el equipo. Así, como aquellos adolescentes enamorados que se piden "un tiempo para pensar", los que formamos parte del equipo comenzamos a extrañar los sábados de Toco: el fútbol, el aire libre, los viajes, las parrilladas postpartido, la alegría por las victorias y, también, las tristeza momentánea del partido perdido. Toco necesitaba de su gente para recuperarse, así como su gente necesitaba de Toco para poder vivir dignamente y en felicidad.

Ni lerdos ni perezosos, entonces, los referentes del equipo tomaron el toro por las astas y decidieron darle el empuje necesario a la renovación del proyecto: remeras nuevas, fiesta de presentación del plantel (a la altura de la que hacen los grandes equipos de Europa), recuperando los valores del compañerismo, la alegría, bajo el lema de "Toco y me voy, Campeón de la Amistá" que había sido dejado de lado en el último tiempo. Así, de esta manera, el equipo recuperó la mística, sus jugadores las ganas y se juramentaron dejar todo para volver a disfrutar siendo parte de Toco, comprometiéndose a dar todo (y un poquito más) en pos del equipo.

De esta manera, y luego de varios amistosos signados por una recuperación futbolistica y la lamentable lesión de Junior, el nuevo capitán del equipo, Toco llegó a debut del Torneo Clausura Calcio "A" enfrentándose al siempre difícil Empetrolados, que en el Torneo pasado había terminado en uno de los puestos de vanguardia. El debut no podía ser más desafiante para los muchachos del rojinegro, que debían ofrecer lo mejor de si para sacar adelante el partido. Con Leito Sardella en el banquillo y la presentación de los nuevos refuerzos (Tío, Sapo, Leo M. y la vuelta del inoxidable Diego) el equipo salió a la cancha con determinación, intensidad y astucia, decidido a llevarse los tres puntos. Fue tal el ímpetu que logró establecer la diferencia en el marcador casi en la primer jugada del partido: excelente acción individual de Diego, quién con un fortísimo zurdazo exigió la respuesta del arquero rival (de mucho parecido al jugador de Boca, "Cata Díaz"), permitiendo que Jimmy, el hombre que nunca se despeina, mande la pelota al fondo de la red.

El gol envalentonó a los dirigidos por Leíto, quién olieron sangre y fueron a buscar la definición del partido, fortificándose bien en defensa y buscando contragolpear a través de un Diego que se mostraba endiablado, como en sus mejores momentos. Empetrolados no lograba hacer pie en el mediocampo y mostraba muchas falencias en la última línea, por lo que sus delanteros (que eran realmente muy buenos) quedaban aislados del resto del equipo. Así pues, gracias a un gran pase de Tincho, Diego volvió a enfrentar nuevamente al Falso Cata Díaz, quién lo derribó cuando el número 10 ya lo había gambeteado y se iba decididamente al gol: expulsión, penal, que fue canjeado por gol gracias a la eficacia de Kiko para ejecutar dos penales (el primero anulado por invasión de zona) con precisión de cirujano.

Con el 2-0 y un hombre de más, el partido parecía definido para el equipo rojinegro. Pero todo lo bueno que se había hecho durante el primer tiempo, no se hizo en el complemento: sin Diego en cancha (lesionado luego de la jugada del penal) el equipo se quedó sin ataque, el mediocampo perdió la brújula y el dominio, tanto de posesión como de territorio, fue de Empetrolados, quién comenzó a atacar de forma incisiva y contundente. Los delanteros, que habían quedado aislados en el primer tiempo, comenzaron a tomar preponderancia en el juego y pasaron a mostrar toda su valía. A Toco solamente le tocaba defender la ventaja con el corazón en la mano y el cuchillo entre los dientes.

A pesar de los cambios intentados por Leíto el equipo no hizo pie en ningún momento del Segundo Tiempo. Empetrolados tomó las riendas del partido, llegó al descuento faltando 20 minutos para el final y, de no haber sido por dos o tres intervenciones excelentes por parte del Gordo, se podría haber llevado un empate con tintes heroicos. Pero, gracias a Dios, nada de esto sucedió. La suerte estuvo de lado de Toco, que aguantó el partido y se llevó como premio 3 puntos vitales para arrancar el campeonato de la mejor manera y seguir confiando en la remontada del equipo. Porque parafraseando al dirigente del equipo del actual campeón de América: "Toco vuelve a ser Toco".

PUNTAJES.

Gordo. 8. Flamante Padre y Capitán del equipo, en el primer tiempo fue un espectador de lujo, salvo por un tiro libre que contuvo sin mucha dificultad. Pero en el complemento se vistió de héroe tapando 4 pelotas increíbles que ayudaron a mantener su triunfo. A pesar de sus problemas físicos y su inactividad, volvió a mostrar que si, domina sus fantasmas mentales, es el mejor arquero de la galaxia.

Angel. 6. Fue de manos a más. Al principio le costó con el wing izquierdo rival al cual se decía por lo bajo que triplicaba en edad. Pero con el correr de los minutos se fue afianzando, mostrándose sólido en la marca y prolijo en la proyección. Gracias a su brazo bionico, ejercitado en la semana, se lo vio muy atinado en los laterales.

Fabri. 9. Si bien hubo muchos puntos altos, a mi criterio Fabricio jugó el partido perfecto. Primero, hay que tener en cuenta que lo hizo en un puesto en el cual no lo hace habitualmente. Segundo, que tuvo la difícil labor de reemplazar a Junior, un histórico del equipo, que viene jugando de 2 desde hace mucho. Pero, además de estos condicionamientos, su partido fue PERFECTO. Por arriba ganó todo, por abajo fue inexpugnable. Cuando tenía que salir jugando, lo hizo con categoría y cuando la tuvo que tirar al demonio, lo hizo sin ponerse colorado. Además ganó en todos los cruces con mucha prestancia y personalidad. Sin dudas, una soberbia actuación, que lo erigió como figura del equipo y del partido.

Ema. 6. Correcto partido de este lampiño y blanquecino central, quién tuvo un duelo particular con el Nro. 10 contrario. En el primer tiempo lo dominó con marca agresiva e intensa. En el complemento tuvo algunas complicaciones que lo llevaron a cometer algunas infracciones peligrosas, sobre todo cuando iba a cubrir a los laterales.

Nico. 8. A pesar de su juventud y su apariencia aniñada, jugó con el aplomo y la categoría de un veterano de mil batallas. A pesar de que Empetrolados desarrollaba el juego por su lado, nunca pudieron con este jovencito que tuvo una tarde muy buena. Además de todo, fue clave en algunos cierres a espaldas de los centrales cuando los ataques venían por la derecha, mostrando todo su oficio como jugador serio y rendidor.

Jimmy. 7. Si bien creo que todavía está lejos de su verdadero nivel, el hecho de que haya convertido el primer gol del equipo en el torneo le apuntala la calificación. El gol fue un premio a su predisposición de ir siempre al ataque: olfateó la jugada de Diego y un posible rebote del arquero, teniendo que solamente mandar la pelota al fondo de la red con un toque suave. Si se serena un poco, se anima a parar la pelota y a jugar con algo más de pausa (y la misma intensidad) puede ser un jugador importantisimo en el equipo.

Guille. 6. Correcto partido, sobre todo en la faz defensiva. No tuvo mucha participación en el circuito creativo, pero siempre estuvo bien ubicado, relevando a sus compañeros, reforzando la zaga cuando era necesario y cruzando a espaldas de los laterales cuando la jugada lo pedía. Jugó con tranquilidad y aplomo en un partido caliente.

Pablo. 7. Jugó solo en el primer tiempo porque una amarilla y algunos comportamientos lo hicieron quedar al borde de la expulsión. Sin dudar,  Leíto determinó su cambio en el entretiempo y el equipo lo sintió, sobre todo por la pausa y el pase justo que aportó durante esos primeros 40 minutos. De a poco va recuperando su mejor nivel.

Martín. 6. En el primer tiempo fue uno de los jugadores más importantes del equipo, cuando desde la parte izquierda y con todo su "sex-appael" manejó los hilos del equipo, aportando posesión de pelota y algunos pases medidos, como el que terminó con el penal del segundo gol. En el complemento su rendimiento mermó (como el todo el equipo) y ya no fue tan determinante.

Kiko. 6. En el primer tiempo, junto con Diego, fue una pesadilla para toda la defensa rival. Sobre todo por izquierda, complicó con sus diagonales y su sagacidad de Viejo Lobo. Tomó la responsabilidad del penal y ejecutó las dos veces de forma magistral, engañando al arquero rival con un singular movimiento de cinturas. En el complemento, luchó pero poco pudo hacer, preso de su soledad y del poco juego asociado del equipo.

Diego. 8. 40 minutos (35 para ser más exactos) de pleno talento. Como en los viejos tiempos, demostró todas sus innumerables virtudes como futbolista: gambeta, coraje, picardía, mostrando tal voracidad por el gol que lo hace olvidarse por completo del contexto en pos de buscar meter la pelotita dentro del arco rival. Por esas cosas del fútbol no pudo marcar, pero fue autor intelectual del primer gol (luego de una excelente jugada y un zurdazo fortísimo que exigó al arquero rival) y clave en el penal, recibiendo una fuerte falta que lo dejó fuera del partido. Su misión ya había sido cumplida, sólo le falto el gol propio.

Abuelo. 6. Como delantero le costó muchísimo jugando de espaldas al arco contrario, casi siempre fue primereado por los defensores rivales que eran muy ásperos en la marca. Cuando le cambiaron la posición y fue de volante, mostró mejor valía, relevándose bien con Nico en la faceta defensiva y jugando con criterio.

Sapo. 6. Al revés que el Abuelo: como mediocampista se lo notó perdido, como deambulando por la cancha, sin poder tomar bien las marcas y con poca participación en el juego. Ahora bien, cuando jugó de delantero entendió el juego de aguantar de espaldas y descargar de forma precisa hacia los volantes. Tuvo una chance clarísima, luego de ir a luchar una pelota que parecía perdida, pero su definición se fue apenas alta.

Tío. 6. La presentación de uno de los refuerzos que, gracias a su carisma y buena onda, se ha puesto a la parcialidad rojinegra en el bolsillo. Entró de lateral derecho y ayudó a clausurar su banda, apelando al juego belicoso y brutal al cual nos tiene acostumbrado.

Leo M. 6. El otro refuerzo que llegó a la institución en el último momento debido a la lesión de Junior. Si bien sus pergaminos y su extensa carrera lo sitúan como un jugador con muchísimo potencial es entendible que aún no esté en su mejor estado de forma. Cuando recupere el ritmo y conozca a sus compañeros, será un jugador importante para el equipo.

Leíto. 8. Debut oficial para el nuevo "allenatore" del equipo, quién transcurre su tiempo entre los excesos y la vida licenciosa. En la charla previa se le trababa un poco la lengua, quizás por los nervios del debut o producto de una noche de viernes algo intensa, pero a medida que pasaron los minutos del partido se lo mostró más sobrio y con mejor trato hacia sus dirigidos. Planteó bien el partido, motivando a su tropa con los lugares comunes típicos de los entrenadores: "juguemos al fútbol", "seamos ordenados", etc. Luego del partido, ya con el pecho inflado por la victoria, siguió haciendo uso de los mismos cliches: "prueba de carácter", "partido de seis puntos", siendo seguramente esto, una constante a lo largo de toda la campaña que se avecina.

Mención especial: para los jugadores/hinchas que acompañaron al equipo en el debut. Tute quién se recupera de una lesión y asumió el rol de PF del equipo, llegando tarde en su primer día de trabajo y haciendo una entrada en calor exigente. Charly, que se dio de baja en último momento por estar afectado por una infección respiratoria; Mariana, que acompañó a su novio Diego y al Junior, el emblema y capitán del equipo, el cual se recupera de su lesión en la cara y aportó una cuota de ternura a la mañana juntando quinotos y ofreciéndoselos a sus amigos, como si se tratase de Charles Ingalls del subdesarrollo. Tampoco sería justo olvidarse del "desechable" Pachu, quién se vistió completamente para la foto institucional del equipo, asumiendo el puesto de aguatero oficial  siempre dispuesto para ingresar al campo a interrumpir el partido y hacer tiempo.