26 de junio de 2010

La Alegría es sólo rojinegra

TOCO 3 - ALEGRÍA 2

En los momentos mundialistas, cuando uno ve fútbol todos los días y a toda hora, se comienzan a repasar algunos conceptos y aspectos de este juego, como diría el chicano de la ESPN, "el más lindo del mundo". Equipos que juegan bien, otros que también pero que fracasan en las citas importantes, otros que tienen su libretito y los otros que n0 juegan del todo bien, pero compensan sus limitaciones con coraje y actitud. El fútbol es tan lindo que todos pueden jugarlo: los talentosos, los batalladores, los inteligentes, los sanguinarios, aquellos que lo entienden y, para ser más mágico aún, aquellos que lo sienten. Lo bueno es que Toco tiene un poco de todo esto, de lo bueno y de lo malo, y por eso el equipo es lo que es.

Comenzó bien el partido para dirigidos por Matute, haciendo fuerte en la mitad de la cancha y demostrando que tanto individual como colectivamente, era mejor que su rival. El mediocampo apretaba con Junior, Guille y Pachu, mandaba Loro para asistir a talento de Diego y la movilidad del Abuelo. Con esos argumentos, Toco era mucho más que su rival. De hecho tuvo algunas chances concretas: Junior llegando vacío por derecha casi aprovecha un buen pelotazo de Guille, para marcar su gol. Era cuestión de paciencia y precisión para llegar al gol: triangulación en la mitad de la cancha, pase en profundidad del Loro, Diego rompiendo la línea defensiva rival, sabiendo que cuando eso pasa nada ni nadie parece detenerlo. 1-0, justicia traducida en el resultado. Así Toco aflojó un poco la máquina y Alegría comenzó a dominar un poco más la pelota, pero dando ventajas en su última línea: cada pelotazo que salía de la zona de volante peligro inminente de gol. Unas posiciones adelantadas algo dudosas impidieron que Toco extienda el marcador y ante una desatención defensiva, y casi sin proponérselo, Alegría llegó al empate.

Fue un golpe duro, Toco siguió buscando, pero ya sin la solvencia ni la fineza de los primeros minutos, y el partido se fue al entretiempo en paridad. Ya en el parate, Matute demostró que no le tiembla el pulso y que la rotación no sólo es ley, sino que también se aplica: mandó a la cancha a Jimmy y Luis, en lugar de Gonza y de Guille, quién había jugado un interesante primer tiempo. Sin embargo, la estructura no se resintió, Toco siguió manejando los hilos del partido, pero ahora la situación no estaba tan fácil: el viento en contra, la lluvia, la noche y el ímpetu de un rival que dejó todo, hizo que el partido se haga muchísimo más parejo. Hasta que Diego lo desbarató de nuevo con la fórmula de siempre: marcar el pase, correr un pelotazo, ganarlo y transformarlo en gol, algo que es dificilísimo de lograr, pero que este genio del fútbol mundial lo hace con una facilidad envidiable. 2-1, las cosas en su lugar, pero nuevamente la suerte era esquiva: buena triangulación de Alegría por izquierda, llegar al fondo, centro y cabezazo al fondo de la red, una antigua combinación que todavía nadie ha sabido contrarrestar ni superar.

Con el 2-2, la lluvia, la noche y el viento, el partido entró en terreno místico. Ya los dos equipos desnudaban sus falencias, el juego carecía por su presencia, pero era la hora de jugar con el corazón. Ambos equipos regalaron un partido muy emotivo: Toco atacando por obligación y para demostrar que por algo está arriba, Alegría defendiendo el empate que a esa altura cotizaba en oro. Parecía que la paridad era el premio de uno y el castigo de otro, hasta que llegó una jugada de otro partido: a los ponchazos, tres pases seguidos (cuando parecía imposible hacerse) y Pachu con un remate y gol consagratorio. 3-2, a pocos minutos del final, para la algarabía de todos los fanáticos que ya combatían el frío polar de CITEFA, con bebidas fuertes y drogas de las más duras. Era el premio merecido para un equipo que lo buscó, lo peleó y lo encontró. Sin embargo, el partido no estaba definido: los cambios de Matute buscando la victoria habían dejado en cancha sólo dos defensores naturales (Luis y Leo). Era cuestión de defender como sea, y ahí fue cuando apareció la figura de este golero legendario, que casi no había intervenido en el partido y que apareció cuando el equipo más lo necesitaba: respondiendo seguro ante un tiro que fue complicado por la poca visibilidad que había, y un puñetazo histórico para evitar lo que era el empate.

Cuando el árbitro marcó el centro de la cancha indicando el final del partido, el pueblo rojinegro estalló en alegría, con una mezcla de desahogo y felicidad por el triunfo. Se había logrado ganar un partido chivo, de esos que se complican y que ponen a prueba la personalidad de los equipos. Es cierto, no fue el mejor partido del año, sigue habiendo mucho para mejorar, pero Toco mostró entereza, valor y convicción para llevarse los dos puntos y seguir en la pelea. Este equipo, se merece, se merece, ser campeón.

GOLES.

1-0. Diego. Buena jugada entre Loro y creo que Pachu. Buenísima pelota de Loro, Diego que gambetea al arquero y define con el arco a su merced. Asistencia: Loro
1-1. Nro 5 rival. Pelotazo frontal luego de un afortunado tiro libre, dudas entre los defensores y el Gordo, aparición fantasmal de este ignoto muchacho para marcar el empate.
2-1. Diego. Otra vez se hizo lo que pedía el partido: dos o tres toques para distraer y estiletazo para el pequeño delantero. El tipito como que hizo una gambeta sólo con el cuerpo, sin tocar la pelota, y se metió con pelota y todo dentro del arco. Asistencia: hubo alguien que tiró el pase entre líneas, o no se si la peinó el Loro, en la semana se define.
2-2. Nro xxx Rival. Buen jugada combinada de los rivales por derecha. Tres toques rápidos, el Nro de 5 que tira un buen centro a la carrera y un paisano que andaba por ahí la metió al fondo de la red.
3-2. Pachu. Toco empujando sin ideas y sin futbol. Eber la tira para arriba, le queda al Loro que se la da a Pachu que no dudó: un tiro raro mezcla de empeine y puntín, inatajable para el arquero. Asistencia: No creo que le cuente para el Loro, fue un unipersonel de nuestro querido y amado "pibe golosina".

PUNTAJES.

Gordo. 7. Bastión estructural de la victoria conseguida. Quizás en el primer gol no tuvo la determinación para salir y "romper todo", pero apareció en el momento más picante del partido: retuvo sin rebote una pelota complicada abajo y metió sus puños para salvar el pezcuezo del equipo.

Cobany. 6. Alternó buenas y malas por su sector. A veces se proyectó bien, a veces mal; a veces marcó bien, a veces mal. Hizo todo así, 50 y 50, como le gusta el Fernet a este bonachón del lateral.

Leo. 7. Como siempre un pilar. Hizo lo de siempre: sacó por arriba, sacó de abajo, mostrando estética en todas las jugadas. No tuvo piedad para tumbar a un contrario que había cortado la línea defensiva, ganandose un merecida amarilla.

Gonza. 6. Bien en casi todas sus intervenciones. Sólido, simple, expeditivo. Pocas pulgas para no dudar y despejar. Salió en el entretiempo, dejando su lugar y tomando otro junto a barra, dónde se lo vio bastante agresivo y agitador.

Tute. 6. Al igual que el otro latera, alternó buenas y malas. Algunos quites de su clase, otras dudas que pudieron ser garrafales y no lo fueron. En el segundo tiempo pasó de central, dónde mejoró su nivel. Salió reemplazado cuando el equipo buscaba el triunfo y Matute metió toda la carne en el asador.

Junior. 7. Otro de los valuartes de la columna vertebral que se bancó, buscó y ganó el partido. En el primer tiempo como un 8 con mucha dinámica, fuerza y presencia en el área: pudo festejar en grande, cuando su remate cruzó todo el arco. En el segundo tiempo, pasó a jugar de mediocampista central haciendose muy fuerte en la marca y en el retroceso.

Guille. 7. Con sólo 40 minutos demostró que en cualquier momento puede volver a su mejor nivel. Es una buena noticia para el equipo, no porque sea un genio del fútbol, sino porque su posición es la más importante de la cancha y si está preciso, el equipo se mueve al ritmo de sus pies, muy torpes para el baile pero efectivos para el fútbol.

Pachu. 8. Actuación consagratoria de este personaje de Flores y de toda Buenos Aires. Corrió, metió, luchó, se equivocó, pero siempre con un sentido de colaboración hacia el equipo. Cuando alguno esta cansado, lo busca a Pachu y le dice:"quedate cerca". El va y lo hace. Coronó su actuación con el gol que nos dio la victoria. Aún exhausto, buscó festejarlo con toda la afición, que lo tiene entre sus predilectos.

Loro. 7. Muchas veces en el fútbol se ha hablado de los jugadores fríos. También se suelen llamar "laguneros", algo que nunca entendí muy bien. Lo cierto es que estos jugadores son los que piensan el fútbol, entonces para pensar, es necesario primero abstrearse, irse del partido, para entenderlo y luego, a partir de ese entendimiento, jugarlo. Así fue el Loro. En el primer tiempo apareció con el toque justo para Diego. En el segundo tiempo, entendió de la necesidad del equipo de tener más presencia en el área: fue, pivoteo, ganó de arriba y colaboró para el gol de Pachu.

Abuelo. 7. Muy correcto partido de este emblema de la nueva generación (la generación dorada y de sabor intenso). Incluso en algunos momentos jugó con mucha creatividad, calidad e inventiva. Pivoteó bien, fue bien a los costados, aunque tenía un problema con la caja de cambios y no pudo desnivelar. Salió exhausto, pero se notó que si hubiese tenido resto, quizás hasta se hubiese despachado con algunos goles.

Diego. 8. Autor de dos goles, sigue demostrando partido tras partido, su sed insaciable de gol y gloria. Si agarra la pelota dentro de los últimos 25 metros de la cancha cualquier cosa puede pasar: un golazo, una apilada, una vaselina, un pase-gol, un tiro libre. Es un mago, dónde la pelota es el conejo, su cintura la paloma y su pie derecho la varita.

Luis. 6. Visiblemente eufórico por la victoria de los uruguayos en la Copa del Mundo, Luis se recuperó en tiempo récord de una lesión que lo tenía en duda y salió a la cancha para hacer lo que mas le gusta: custadiar el lateral izquierdo de Toco. Buena actuación, con dos perlitas: un tiro libre que se fue desviado pero que tenía una interesante potencia y una proyección hasta el fondo, que no terminó el gol histórico porque se quedó sin resto.

Jimmy. 6. Hombre coqueto, de pocas palabras, pero gran corazón, esta aún jóven promesa del equipo salió a la cancha para demostrar que puede y quiere ganarse un lugar en el equipo inicial. A él no le importa ni la posición ni el rival, el tipo sale y hace lo suyo: correr, desbordar, desnivelar con su fuerza, su velocidad, para llegar al fondo y terminar todo con un lindo centro. Un verdadero valuarte.

Berty. 6. Entró cuando el partido estaba caliente y solamente podían entrar tipos experimentados, serenos y afianzado. Por eso entró la gran Bruja, para aportar su sapienza. Pegó algunas patadas, hizo uso de su fuerza física que aterra rivales y hasta respondió ante los pedidos de la tribuna mostrándose como alternativa para el ataque por derecha.

Bata. 6. Otra apuesta de Matute. El partido no se abría y nuestro entrenador ya estaba tirando al paño las últimas fichas que faltaban. Saltó Batata a la cancha, pero nunca pudo meterse en el partido. Fue como que no pudo encontrar su lugar. Una lástima, porque los rivales mostraban falencias en defensa.

Eber. 6. Le tocó bailar con la más fea, entrar con el partido muy caliente, en los minutos definitorios. Si bien es cierto que jugó poco (hacía mucho que no estaba en los partidos y su condición física era una incógnita), jugó los minutos más lindos del partido. Entró, abrió la cancha, tuvo participación secundaria en el gol de Pachu y se quedó con la última pelota del partido, cuando puso en riesgo su humanidad por el triunfo del equipo.

21 de junio de 2010

Toco, Mato y Sigo

Toco 2 - Boreal 0.

En la jerga de las peliculas, las sagas y demas, se acostumbra decir que las segundas partes "nunca fueron buenas". No entiendo ni el origen, ni la explicación de esta frase de dudosa origen pero que muchos repiten sin pensar. Evidentemente, esta frase no se vincula con Toco, o al menos en el partido de hoy. Luego de un primer tiempo bastante flojo, el equipo pudo recuperarse para vencer por diferencia de dos a Boreal, pero sobre todo pudo sobreponerse a su mal comienzo, dando evidencia de que el rival más peligroso de Toco, es Toco.

Este trabalenguas es así desde los inicios de la historia de este equipo y se vislumbró en la primera etapa, cuando el equipo fue una sombra de lo que realmente puede ser. La defensa se mostraba vulnerable, Guille no hacía pie en el medio, Tute estaba perdido como volante izquierdo y el espiritu y empuje de Junior, era realmente poco para buscar una victoria. Así, Pachu, Diego y Loro quedaban totalmente aislados, Toco no podía manejar la pelota, y cuando la conseguía la rifaba sin criterio. El panorama era oscuro: Boreal se mostraba como un equipo jóven, muy rápido y con algunos jugadores de muy buena técnica, mientras que los dirigidos por Lamouret no podía hacerse fuerte en ninguno de los sectores de la cancha.

Pero, sin embargo, el equipo mantuvo el orden hasta llevarse un empate valiosísimo al entretiempo. Es cierto que Boreal no pudo traducir su dominio en llegadas (ni mucho menos en goles) pero había dejado una mejor imagen. Era necesario un cambio, un golpe de timón, y esta vez Matute (indolente entrenador, pero que se muestra con algunos conceptos muy claros) movió las piezas de la mejor manera: acertó con el ingreso de Toti, pero fundamentalmente, fue clave el cambio posicional de Guille, que dejó de hacer agua en el mediocampo y se hizo fuerte más retrazado en el campo, bien cerquita de Leo y Gonza. Así, el equipo se serenó, comenzó a dominar la pelota y el territorio. La pelota llegaba más limpia a Diego, y cuando eso pasa, Toco se transforma en un equipo peligroso. De esta manera, una jugada bien elaborada por derecha, le permitió a Diego meter un desborde con una velocidad supersónica, asistiendo al Loro que terminó la jugada con un pase a la red.

Con la venteja en el bolsillo, Toco se serenó aun más y mostró los mejores minutos de fútbol de la tarde. La salida prolija con Luis y Lavezi, la seguridad de la zaga central y la movilidad de Toti, que le dio aire, fútbol y frescura al equipo. En una de sus tantas intervenciones, armó una linda pared con Diego y con un remate seco marcó el 2-0 desatando la algarabía de todos los simpatizantes de Toco, que se acercaron en gran cantidad para seguir al equipo. Después del segundo gol fue el momento en dónde Toco justificó la victoria, ya con Jimmy y Eber en cancha, la potencia de estos dos jugadores arrancando desde la zona derecha del ataque fueron mucho para los tiernos defensores contrarios. Pero, cuando parecía que el partido iba a terminar sin contratiempos llegó el minuto fatal: primero con la expulsión de Jimmy por meter un gol con la mano (el hecho de que el jovial carrilero no tenía una amarilla previa denota la calidad del árbitro que dirigió el partido y sus ganas de compensar luego de echar al 3 rival) y acto seguido Lavezi acusó una lesión muscular cuando se habían agotado los cambios. Toco pasó de tener 11 jugadores a tener 9 y Boreal se vino con todo en busca del descuento, contando con una jugada clave que el Gordo rechazó de manera magnífica.

Los embates de los delanteros rivales fueron agrandando la figura de Leo y de Angel que sacaron todo, mostrandose como pilar fundamentales de la victoria. Lo importante, sin embargo, fue la solidaridad del equipo cuando se quedó con 9 hombres: Berty marcando punta, Emi jugando de carrilero, y todos dejando algo más que el alma para mantener la ventaja que habíamos obtenido. Por eso, cuando el arbitro marcó la mitad de la cancha dándole fin al encuentro, todo el pueblo rojinegro estalló de alegría, por haber conseguido una victoria justa y merecida, que sigue alimentando el sueño de terminar el campeonato lo más arriba posible.

Goles.
1-0: Loro. Desborde maradoniano de Diego con velocidad supersónica. Centro atras y aparición fantasmagórica del Loro para marcar su segundo gol en dos partidos. Buen grito, se abría un partido complicado.
2-0: Toti. Luego de rescatar una pelota en la mitad de la cancha, el enganche jugó una rapida pared con Diego, y cuando se generó el claro, le pegó con alma y vida, decretando un gol bien mundialista: remate fuerte, la pelota que vivorea más el arquero que hizo su aporte. Carrera alocada de este jóven adicto a la noche y las mujeres fáciles buscando al Nene, viejo compañero de parranda, para dedicarle su obra.

Puntajes.

Gordo. 7. Mostró seguridad y tranquilidad en todo momento. En el primer tiempo, no fue muy exigido pero siempre respondió con sobriedad. En el segundo tiempo, tuvo una atajada espectacular con el patido 2-0: desborde, centro atras, el 9 que remata a quemarropa a lo que el legendario golero respondió enfrentando la pelota con la valentía de un dinosaurio. Imprecisos en los saques de arco.

Cobany. 6. Al haber jugado sólo el primer tiempo (de lo peor del equipo en el torneo, me animaría a decir) su actuación comenzó bastante desdibujada pero se fue acoplando con el correr de los minutos sobre todo gracias a la brutalidad con al que trató a los delanteros contrarios y le significó una amonestación tempranera.

Leo. 7. Decir que fue uno de los puntos altos del equipo me parece algo trillado. Siempre es de lo mejorcito, por todas las facultades que tiene como futbolísta y que marcamos partido tras partido. Además de eso, le está agregando a su nivel mucha regularidad y eso el equipo lo siente para bien.

Angel. 7. Otro que fue de menor a mayor. Arrancó con complicaciones debido a la velocidad y la precisión de los delanteros rivales. Sometió a algunos de ellos, sobre todo con su ya legendario teledirigido a la rodilla, que lo desenfundó para no dar ventajas luego de su agitado viaje hacia la costa atlántica. En el segundo tiempo mejoró muchísimo, se hizo amo y señor de la defensa, sumandole a todo esto una corajeada histórica, cortando una pelota en zona defensiva y llegando hasta el área rival, cuando tuvo que ser detenido con un foul.

Luis. 6. Otra buena actuación de este lateral oriundo de la ciudad de Canelones (Uruguay), en dónde es una leyenda viviente. Bien en la marca, correcto en la proyección y muy creativo para crear un juego con unas piolas y una botellita, que se llevó la atención de la afición.

Junior. 6. Durante el pobre primer tiempo del equipo, el capitán fue el único que hizo pie en la mitad de la cancha colaborando en la marca e intentando jugar la pelota siempre a un compañero bien ubicado. Empezó bien, para comerse la cancha, pero con el correr de los minutos fue ganando en nerviosismo y perdiendo en serenidad para jugar y pensar el partido. Le pidió el cambio a Matute en el entretiempo, quizás cansado por el desgastante viaje.

Guille. 6. Un primer tiempo flojísimo, en donde no hizo nada bien: no marcó a nadie, le dio todas las pelotas a los contrarios y tuvo muy poca participación en el juego. Como por arte de magia, el segundo tiempo fue muy bueno: se paró unos metritos más atras (detras de los volantes externos), aprovechó el buen partido de Toti como enganche y comenzó a recuperar pelotas y darle a todas un claro destino, terminando siendo uno de los bastiones del equipo.

Tute. 6. Arrancó como volante por izquierda con mucha movilidad y ganas de convertirse en un delantero más, llegando al fondo con y sin la pelota. No lo logró muchas veces y después quedó un poco desacomodado en el mediocampo, aunque suplió todo con ganas y mucho despliegue. En el segundo tiempo cambió de punta, tuvo algunas intervenciones positivas y se fue reemplazado a los 10 minutos.

Loro. 7. En el primer tiempo fue como enganche, posición dónde, si bien anteriormente había tenido buenos partidos, últimamente se lo nota algo perdido. Obviamente que cada vez que la pelota pasa por sus pies, le da un destino preciso a la misma (gracias a toda su calidad), pero a veces se ausenta sin aviso del partido. En el segundo tiempo fue como delantero, tuvo poca participación hasta que fue letal luego de un desborde de Diego, tocando hacia el fondo de la red, marcando su segundo gol en dos partidos.

Diego. 7. Nuevamente, y como nos tiene acostumbrados, volvió a ser determinante para el equipo y para el resultado. Un primer tiempo gris, lejos de sus compañeros de ataque y de juego. Poca asistencia, nada de desequilibrio. En el segundo tiempo salió con otra actitud, como si se hubiera decidido a ganar el partido. Con la expulsión del lateral izquierdo rival entendió que se había abierto una brecha por la derecha del ataque, y fue ahí dónde hizo la mejor jugada del partido: desborde a pura velocidad, freno, centro atras, asistencia y gol de Loro. Así de simple, así de complicado, como sólo los genios saben hacerlo.

Pachu. 6. En el primer tiempo sufrió lo mismo que Diego. El equipo estaba partido, no recibía la pelota y cuando tenía la suerte de recibirla, siempre había más remeras rivales que propias. En el segundo tiempo Matute lo retrazó en el campo, jugó de volante por izquierda y fue muy importante, por su velocidad (ante un equipo rápido como el de hoy), recuperando muchas pelotas y pasando al ataque.

Toti. 7. Ingresó determinante para el equipo. Jugando de enganche, pero aportando mucho desde la marca, el choque y el sacrificio, Toti fue eslabon que le faltaba a un mediocampo que estaba descontrolado. Ayudó tapando al 5 y despues fue feroz, en un partido que pedía hacha y tiza. Se juntó bien con Diego, bien con el Loro y terminó su buena tarde con un lindo gol de media distancia.

Lavezi. 6. Nuevamente Matute lo mandó a la cancha como lateral izquierdo, a esta nueva versión del carrilero zurdo que partido tras partido juega, muestra sus condiciones y se mata por ganarse un puesto en el 11 inicial. Sus actuaciones son convicnetes y van de menor a mayor. Se resintió de una lesión muscular que lo aqueja y tuvo que abandonar el puesto dónde había hecho mejor las cosas.

Jimmy. 6. Ingresó como volante derecho, en lugar de Tute. En la primer jugada dudó ante un cambio de frente, lo presionaron, le ganaron la pelota y no fue gol de milagro. Entendió que era un partido dónde había que estar atento, despiero y resoluto, así jugó el resto de sus minutos en cancha, hasta que en una de las injusticias más grandes de la historia del fútbol, fue expulsado por intentar hacer un gol con la mano sin tener una amarilla previa.

Berty. 6. Otro que ingresó en el momento más caliente del partido. Se lo vio sereno, preciso y ubicado. Aportó la habitual cuota de violencia y carromato (ya los rivales comentan acerca de su brutalidad), pero además estuvo tranquilo, entendiendo que el partido consistía en tener poco la pelota en sus pies, dándole un destino preciso a la pelota.

Emi. 6. Un ingreso que podría haber sido determinante. Sorprendió con su fuerza y potencia en los metros finales, encarando con muchas ganas y mucha velocidad. Parecía que el contragolpe era una excusa perfecta para hacer un partido inolvidable, con dos o tres goles incluídos (de hecho casi lo logra luego de una apilada magnífica), pero la expulsión del Jimmy le cortó las alas: tuvo que dejar el ataque y hacer el recorrido por punta derecha, ayundando un poco más en defensa.

5 de junio de 2010

IDOLO SE NACE y SE HACE

A lo largo del tiempo, el fútbol ha sido un juego que muchos creen dominar, que muchos estudian, pero que sigue demostrando, partido tras partido, día tras día, que es indescifrable. "Dinamica de lo inpensado" dijo alguna vez algún periodista que ya no está, y, si bien se de quien se trata, no me importa su nombre. Así podemos definir el partido de esta tarde, un partido en dónde Toco dominó a un equipo inferior, y llegó a la victoria en el último suspiro, con una mediavuelta del Loro, este muchacho largirucho, de dudosa nacionalidad y orígen, y que por algún motivo, terminó vistiendo estos colores. "Dinamico de lo impensado" habrá pensado este hombre cuando un partido que era super-ganable, y parecía que se perdía. El remate del 10 contrario había superado la estirada del Gordo, pero un sombra, el espiritu de un caballero inglés, con su "on the rocks" en las manos, en el cuerpo de Leo sacó con un cierre memorable lo que era el 0-1 y la desazón de la tristeza.



Por eso esto de la dinámica y lo impensado. Un partido a priori accesible, que parecía más accesible aún a medida que pasaban los minutos, podría haber sido una derrota que hubiesemos lamentado mucho, y terminó siendo un triunfo agónico, de esos que se festejan y se recuerdan por un largo tiempo. Fueron esas dos jugadas, antes y despues el partido fue monótono, chato, con muchas imprecisiones, acompañada por una cancha con un duro barrial en el medio de la cancha, justo dónde se inician las acciones de juego.



Toco tuvo un primer tiempo en el cual intentó ser prolijo, tocando la pelota entre sus volantes, y con Toti intentando ser la "manija" del juego. Hubo errores, es cierto, pero al menos fue una estrategia, un libreto a seguir. Fallaron los interpretes, no hubo pimienta en el ataque, y, amigo mío, si sin pimienta no se come, mucho menos se va a ganar un partido de fútbol. Entonces Toco volvió a ser áquel equipo de las buenas intenciones para tocar, para intentar, pero con poca capacidad para doblegar a una vulnerable defensa contraria.



En el segundo tiempo Matute movió las fichas y entró Diego, que de eso de lastimar defensas, entiende y mucho. Y Toco volvió a ser el "otro" Toco, áquel equipo que parece una bestia despiadada y que intenta deborarse a su presa de la manera más salvaje. Comandado con su pequeño malavarista y el empuje de un renovado Lavezi por el sector izquierdo, Toco fue a buscar el gol decididamente, como lo pedía el partido y lo pedía su gente. Las ocasiones empezaron a llegar, pero comenzó a agigantarse el arquero rival (le sacó un zurdazo tremendo a Diego de afuera del área), sumado esto a la poca puntería de los hombres de ataque, hizo que este dominio con llegada, no modificara el resultado. Se terminaba el partido con paridad, Matute, como buen timbero, mandó a Batata a la cancha, tirando sobre el paño su última ficha, era cuestión de matar o morir dignamente. Podríamos haber muerto, pero Leo hoy quería que la pelota no entre a nuestro arco, y cuando eso pasa, no hay nada que hacerle. Pero terminamos más vivos que nunca gracias al Loro, que a pesar de su no tan buen partido, demostró porqué la gente lo adoptó como nuevo ídolo: recibió una dudosa asistencia de Pachu y con una mediavuelta poco vistosa, marcó el gol del triunfo, para la algarabía de la afición, quién ingresó desaforadamente para estrecharse en un abrazo eterno con su jugador fetiche.



Así terminó el partido, con el extasis de haber conseguido un nuevo triunfo, a pesar de no haber jugado un gran partido. Como dice Santi, lo importante es ganar. Esto nos permite sumar, festejar y descansar, para poder afrontar la semana con entusiasmo y seguir por esta senda victoriosa.



Goles

0-0. Leo. ST 35'. Para este comentarista y todo su entorno fue una jugada tan importante como un gol. Toco intenta salir rápido, Diego recibe la presión y el foul de dos medios rivales y el equipo queda totalmente desbalancedo. Los rivales aprovecharon su superioridad númerica, movieron la pelota, se la sirvieron al nro 10 quien remató bajo y esquinado, superó al Gordo y cuando se metía la sacó Leo en la línea. No quiero exagerar, pero creame, fue una de esas jugadas de los supercampeones, en dónde uno de los japonesitos pateaba tremendo cañonazo, superaba al arquero, pero Oliver Aton o Bruce, o algunos de esos, se tiraba y gracias a algún arte milenario oriental, sacaban la pelota de la línea. Sólo un dibujito japonés y Leo pueden hacerlo.



1-0. Loro. ST 38'. Desborde de Diego por derecha, centro, el arquero lo descuelga al medio del área, Pachu hace algo poco claro, la pelota le queda al Loro que con media vuelta marca el 1-0 final. Buen festejo, la gente ingresó a la cancha sin importarle nada y más de uno se tiraron sobre el ídolo de piernas largas. Asistencia: Pachu (estaban muy ricas las papitas sabor jamón cerrano).



Puntajes



Gordo. 6. Sobrio y seguro como aquellos habitantes del reino unido, que tienen su vida asegurada y se dedican unicamente a trabajar y escabiar cerveza en el pub del distrito. Respondió siempre bien, para destacar el tiro libre del final, que si bien no fue peligroso, aseguró la victoria.

Luis 6. Correcto partido del histórico marcador de punta toquense. Sin problemas en la marca (el equipo rival casi ni atacó por su sector), se mostró siempre como salida, proyectandose con criterio y decisión. Habría que aprovechar más su pegada, no solo en los pelotazos largos sino en los centros que suelen ser bastante picantes.

Leo. 8. Por todo. Por la jugada que relatamos, porque viene siempre,porque juega bárbaro, porque organiza timba, porque es un gran pibe y porque se nota que quiere a Toco con el corazón. Figura estalar de la tarde, sólo quizas opacado por el gol agónico del Loro. Bien en los cruces, bien de arriba, bien de abajo. Fenomenal!

Angel. 7. Un escalón más abajo de Leo podemos encontrar la figura de Angel como uno de los bastiones de la victoria. Le costó en los primeros mintuos tomar al veloz número 10 contrario, pero una vez que se afianzó, fue impasable tanto por arriba como por abajo. Además, intentó empujar con sus ya habituales proyecciones.

Tute. 6. Al igual que Luis, no fue exigido por su sector, debido al poco ataque del equipo rival. Se mostró como salida, con criterio, intentando darle a la pelota un destino correcto.

Junior. 6. La dinámica y las ganas de siempre. Hoy por hoy está entre los jugadores más importantes del equipo, porque muchas de las pelotas pasan por él y es uno de los que inicia las jugadas de ataque. Su juego se basa en la dinámica, la fuerza, el despliegue y la inteligencia. Marca, juega, llega al fondo, busca asociarse con sus compañeros, patea al arco, un jugador muy completo.

Guille. 6. Tuvo que jugar en la zona más anegada de la cancha y lo hizo con bastante criterio. En el primer tiempo estuvo un poco errático en los pases "entre líneas", pero en el segundo tiempo afinó la mira y puso algunas pelotas interesantes.

Mauro. 6. Venía de un par de partidos sin jugar, pero sin embargo, mostró las ganas y la garra de siempre. Al igual que Junior es un tractorcito por su banda: mete, juega, intenta dar buenos pases y llegar al fondo. Salió en el entretiempo, pero lo suyo no fue para nada despreciable.

Toti. 5. Su rendimiento fue de mayor a menor. Empezó intentando ser el eje futbolístico del equipo, pidiendo la pelota, tocando, buscando el lugar exacto para desarrollar su juego. Sus intenciones fueron buenas, pero el equipo careció de fuerza en el ataque durante esa primer etapa. Ya en el segundo, sintió el desgaste, el cansancio y terminó siendo reemplazado.

Pachu. 5. En el primer tiempo se lo vio perdido como delantero. La defensa rival lo absorbió fácilmente y no pudo desnivelar ni con su velocidad ni con su habilidad. En el segundo tiempo, ya como volante externo, tuvo mayor participación y fue importante, por su explosión y capacidad para romper la línea de los mediocampitas rivales.

Loro. 7. Es evidente que está por debajo de su nível tanto físico como futbolístico. Se le nota que le está costando mantener el ritmo y que completar los 80 minutos se ha transformado en una especie de odisea. Pero lo importante fue que volvió a ser determinante y su aparición, a pocos minutos del final del partido, le dio a Toco los 2 puntos. Ojalá que de a poco, pueda ir volviendo a su verdadero nivel.

Cobany. 6. Correcto en la marca, criterioso en sus proyecciones, el crédito de Senillosa y Vernet viene mostrando durante este 2010 una regularidad que lo hace ser uno de los mejores jugadores del equipo.

Lavezi. 7. Ingresó en el ST como lateral izquierdo y fue uno de los puntos más altos del equipo. Aportó con su fuerza para anticipar e ir para adelante. Sumo contagio, pero además criterio para pasar al ataque con mucha polenta. Un valuarte que va levantando su nivel.

Diego. 6. Como indicamos anteriormente, su ingreso volvió a ser determinante para el equipo. Es el único jugador del equipo que tiene el arco rival entre ceja y ceja, a él sólo le importa meter goles. Esto le da al equipo un valor agregado que, al momento, no le da ningun otro jugador de los que compone el plantel. Sin embargo, y paradogicamente, estuvo algo impreciso a la hora de definir y no pudo aprovechar dos chances claras que tuvo para engrosar su rendimiento goleador.

Jimmy. 6. Otro jugador que viene volviendo de una lesión y que mostró un interesante rendimiento, como volante derecho, bien abierto, sumando fuerza, velocidad y desborde. Es importante por su versatilidad (para mi jugar de lateral o volante por ambos lados) y por su juventud.

Batata. 6. Ingresó en el momento más caliente del partido, cuando la paridad estaba clavada y parecía que nadie iba a modificarla. Participó poco del juego, aunque tuvo algunos buenos encuentros futbolísticos con Diego, su compadre dentro de la cancha.