21 de abril de 2013

2da Fecha: Toco 0 - AVL 1

Se comentó tanto el partido durante todo el día de ayer entre lo que hablamos luego del partido y luego en el predio de Spegga, que voy a tratar de hacer una crónica escueta y precisa.

Perdimos. Ante un equipo más débil que nosotros, pero que hizo bien su negocio. Aprovechó nuestras falencias y concretó un gol de puro optimismo: aprovecharon un error en la salida, el que le pegó de afuera del área se tuvo fe, pero el colmo de la esperanza fue el autor de la conquista, quién leyó bien la jugada y capitalizó el rebote del balón en el palo.

Esa fue quizás la única (y gran) diferencia que tuvo el partido. Tuvimos el control del partido durante los primeros 25 minutos. Se mostró que con Fabri y Guille a este nivel, también se puede prescindir del doble cinco, con la idea de lograr juntar más gente en ofensiva. Se intentó con tranquilidad y paciencia, abriendo la cancha y tratando de no caer en el apuro que nos lleva a ser imprecisos. Pero es cierto que nos faltó un poco de precisión en los últimos metros para poder vulnerar la valla adversaria. Meter la pelota en el arco rival (fundamento básico y único objetivo de este juego) se logra generalmente poniendo gente en el área contraria y asistiendo de buena manera. Se falló en las dos premisas: a veces por lo tener gente en la "zona del gol" y otras veces por no ser preciso a la hora del "último pase".

Luego de esos 25 minutos, Toco se desordenó inexplicablemente. Comenzamos a desesperarnos, a inquietarnos por el gol que no llegaba, a pesar de que faltaban aún 60 minutos de partido. Nos desordenamos, comenzamos a fallar en los pases más simples (ya no llegamos con peligrosidad sobre el área contraria) y ellos hicieron pie en el medio, con los mismos recursos por los cuales nosotros habíamos dominado la primera mitad. Tuvieron un par de chances bien elaboradas, que fueron resueltas de forma magnífica por el Gordo, que hace alarde de su buen momento.

La expulsión de Fabri al final del primer tiempo, trastocó los planes. No sólo porque perdimos a uno de nuestros mejores jugadores (sino el mejor) sino porque una expulsión cuando hay tanta gente con expectativas de ingresar, trastoca la planificación que se puede hacer sobre los cambios. Fari intentó (equivocado o no) rearmar la línea con Martín de 8 y el ingreso de Nico por izquierda. Por despliegue, ubicación, roce y estado físico, ninguno de estos dos es Fabri, por lo cual el equipo quedó prácticamente sin mediocampo, con Guille corriendo de un lado para el otro, tratando de hacer pie en el medio. Así, el partido ganó en vértigo y se hizo de ida y vuelta. Ellos aprovecharon ese momento y marcaron el gol que definió el partido: ganaron una pelota en nuestra salida, se animaron a patear de media distancia (algo que en Toco sólo hizo Diego cuando ingresó y un intento tibio de Kiko en el primer tiempo) y a ir a buscar el rebote, el error o el guiño de la suerte y el destino, algo que no hicimos durante toda la tarde.

Con el 1-0, ellos se replegaron y le dieron a Toco la iniciativa para ir a buscar el empate. Se marcó bien en ataque (ellos casi no nos inquietaron en el contragolpe) y se intentó atacar con fundamentos, sobre todo por la punta izquierda en dónde Diego, Nico y Tute armaron las mejores jugadas del equipo. Por derecha no atacamos, nadie tomó la responsabilidad de jugar por esa punta (tímidamente el Abuelo intentó ubicarse por esa zona del ataque) y preocupamos tan sólo por alguna que otra proyección de Jimmy (hasta que salió) y algún centro cruzado de Luis que no llegó a destino. Tuvimos, sin embargo, dos lindas chances para empatarlo, pero ni Charli ni Tute, pudieron vencer al golero rival.

En resumen, una derrota que pudo haberse evitado, ante un rival de nuestro nivel (quizás un poco más bajo) pero que contó con el oportunismo necesario para aprovecharse de un error puntual nuestro. En la necesidad de ver la mitad llena del vaso, se vio un equipo que corrió, que metió y que buscó la paridad hasta último momento, con verguenza deportiva y dignidad. Es lo que nos tiene que quedar como positivo, aunque la dignidad a veces no alcance para lograr un resultado.

Puntajes.

Gordo. (7); Jimmy (6), Junior (6), Gonza (6) y Tute (7); Fabri (4), Guille (7), Martin (5); Kiko (5), Charli (5) y Leo (5).

Ingresaron:
Nico (5)
Diego (6)
Luis (5)
Abuelo (5)



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