Clausura 2011: Toco 1 - Martinez Rosa 1

Toco no pudo vencer a Martinez Rosa, y sólo rescató un punto ante el colista del certamen. Sin jugar bien, el equipo rojinegro hizo méritos para lograr el triunfo, pero entre el arquero rival, la mala fortuna y la impericia a la hora de definir no pudo conseguirlo. Pachu, en el primer tiempo, el autor del gol.

 

Un paso atrás. Es cierto que en resumidas cuentas, Toco y Me Voy debió haber ganado el partido: porque asumió el protagonismo del mismo, porque lo fue a buscar y porque produjo las situaciones de gol como para poder lograrlo. Independientemente de esto, no hay que dejar de considerar que se jugó ante el colista del certamen, que presenta un record de muchos partidos perdidos (y muchos goles recibidos), que completaron 11 jugadores gracias a la inscripción relámpago del "ballboy" del predio, y, aun con todas estas ventajas, no se pudo lograr el cometido de meter un gol más que el contrario.

El sábado se volvió a ver un equipo partido. Como si fuesen dos equipos dentro de uno mismo. En la faz defensiva se volvieron a cometer algunos errores posicionales graves. Paradógicamente, individualmente creo que, a pesar de algunos errores puntuales, todos los defensores tuvieron una actuación aceptable, pero posicionalmente se dejaron muchos espacios sobre todo marcando "en ataque", ante un flojo rival. Por otro lado, en la faz ofensiva el equipo se volvió a confundir vértigo con velocidad, y ante la ausencia del "pase bobo" (ese que en la play se hace con la X, que parece insignificante, pero es la escencia mismo del juego), el juego fue tan vertical que el factor sorpresa fue inexistente.

Sin embargo, Toco contó con las chances necesarias para ganar el cotejo. Luego del sorpresivo gol del rival (remate de larga distancia de otro partido, incluso de otro campeonato), el conjunto rojinegro contó con situaciones para irse al primer tiempo con ventaja: Nico tuvo dos, pero chocó contra los reflejos del arquero rival luego de un tiro libre y contra el travesaño, en la última jugada del primer tiempo, y Batata, armó un jugadón maradoniano, pero se engolosinó entre tanta gambeta y talento, que no le dejó poner el broche de oro ante una jugada magnífica.

El segundo tiempo fue todo de Toco. Con pocas ideas, fue a buscar el partido, obligado por la diferencia que había entre un equipo y el otro. Diego se adelantó más en el terreno y, a pesar de no estar en su mejor forma, dio a entender porque es un jugador diferente cuando juega cerca del área rival. Resuelve bien en el lugar más dificil de la cancha. Participó en todas las situaciones de gol del equipo: dejó a Tute sólo en inmediaciones del área chica, pero el criterioso lateral no pudo cambiar la chance por gol y luego regaló una serie de desbordes a pura velocidad y fantasía, que no pudieron ser capitalizados por sus compañeros de ataque. Alguna zozobra sobre el final, cuando el equipo estaba descompensado en busca de la victoria, dieron la pauta de que Toco no jugó bien, y si bien quedó claro que mereció la victoria, deberá mejorar mucho en todos los aspectos del juego para vencer a rivales más fuertes.

Así cómo el sol se fue retirando de la magnífica tarde de Parque Avelleneda, Toco dejó pasar la situación de volver a sumar dos puntos ante el colista del certamen, que además contó con un equipo emparchado, sin mucho de sus mejores jugadores. No fue una buena tarde a nivel colectivo, nunca se le encontró la mano a un partido que en los papeles era simple. Evidentemente, para los rojinegros nada es simple, todo debe lucharse desde el plano de la humildad, sabiendo que el equipo no es menos, pero tampoco más que nadie. Por lo menos, por ahora.

Goles.

1-1. Pachu. Buena jugada en ataque del equipo que implicó dos o tres "pases tontos" y una habilitación larga de Nico apra Pachu, quien definió con un tiro bombeado y sorpresivo.

Puntajes.

Gordo. 6. Nada que hacer en el gol, en dónde un formidable disparo se le coló en el ángulo. Tuvo una aparición clave en el segundo tiempo, rechanzando bien un contragolpe que pudo haber significado la derrota.

Cobany. 5. De mayor a menor. Arrancó bien, atento para anticipar y criterioso para pasar al ataque. No se si se habrá ahogado en estos primeros minutos intensos, pero su nivel decayó mucho en la segunda mitad del segundo tiempo. Fue reemplazado.

Junior. 6. Si bien se sumó al desorden defensivo general, tuvo algunos cruces y entradas providenciales de esas que evitan goles. Además empujó al equipo desde atras, aportando el coraje de siempre.

Juan. 5. Evidentemente su nivel está siendo perjudicado por la descordinación defensiva que mostró el equipo en los últimos partidos. Primero se ve desordenada a la zaga central que forman con Junior: juegan desacoplados, no se cierran mutuamente a sus espaldas y quedan siempre mano a mano con los delanteros rivales. Si a eso le sumamos que los laterales piensan más en atacar que en defender, hace que su trabajo sea muy dificil. Compensa porque está bien físicamente y gana en el mano a mano, pero deberán reacomodarse las piezas defensivas en vistas al próximo partido.

Tute. 6. Al principio tuvo algunos desacoples en la marca, pero lo compensa con lo que aporta en la faz ofensiva, dado que es un lateral que se suma al ataque con mucho criterio y decisión. Su tandem con Nico es saludable y arman una buena sociedad por la izquierda. Tuvo su chance de gol, pero no pudo capitalizarla.

Batata. 5. En el primer tiempo abusó mucho del pelotazo cruzado sin sentido, cuando, por su posición y categoría, debió haber sido el abanderado del "pase tonto". En el complemento se soltó más en ataque, llegando con peligro a posiciones de gol. Una lástima que su apilada del primer tiempo no haya terminado en gol, fue una jugada magnífica.

Guille. 6. Un buen partido de este flamante trientañero que sigue corriendo con las ganas y el ímpetu de un adolescente. En el complemento fue cuando se hizo lider del mediocampo, recuperando muchas pelotas y dandole a las mismas un destino claro y preciso.

Nico. 7. El mejor jugador del equipo, en una tarde en dónde el conjunto rojinegro no tuvo mucho brillo. Aportó en la marca, en el armado de juego, llegó al fondo, tuvo dos o tres chances de gol claras, metió un brillante tiro libre rechazado por el golero rival y hasta se la bancó solito cuando el veterano zaguero rival quizo coparle la parada. Cada vez más hombre.

Pachu. 6. Alternó buenas y malas. Tuvo algunas corridas eléctricas, algunas jugadas en dónde sus resoluciones no fueron la mejor, pero compensó todo con un gol tan bonito como sopresivo. Aun le falta ritmo futbolístico, pero se muestra como una alternativa válida en ataque.

Diego. 6. Pinceladas de su talento innato e inagotable. Lejos de su mejor versión, siempre se las arregla para meter dos o tres jugadas que marcan de su diferencia sobre el resto. Particularmente destaco tres: asistencia (tras caño monumental) a su hermano Nico en el primer tiempo, asistencia (mirando hacia otro lado) a Tute y un desborde eléctrico por izquierda. Inexplicablemente, está manejando de forma pésima las pelotas paradas: todos sus centros o envíos excenden el alambrado perimetral.

Abuelo. 5. Lucha, sacrificio, voluntad, premisas y valores que el "optimista del gol" nunca negocia. Evidentemente, riden más y mejor cuando ingresa en los segundos tiempos, en dónde el carisma y el optimismo que irradia, puede llegar a definir un partido.

Luis. 5. Parejito en la marca y en la proyección, tuvo la chance de marcar el gol de la victoria pero la pelota nunca le quedó bien para su pierna izquierda. Después alternó buenas y malas por su sector.

Fernando. 5. Inquietó con su velocidad y dinamica en los últimos metros del ataque. Se asoció bien con Diego en algunas jugadas, pero no tuvo ninguna chance neta como para concretar y recibirse de héroe.