CON LAS MANOS VACIAS.

Toco 2 – Paranoicos 3.

Fue una lástima haberse ido sin nada en el partido de hoy. Fue una lástima y una injusticia, porque, a pesar de los errores, Toco tuvo la oportunidad de ganar un partido que se había puesto complicado por haberse quedado con un hombre menos, teniendo que jugar contra rival y sus propias limitaciones. Y a pesar de eso, el equipo tuvo una actitud que maquilló todas las otras falencias. Y fue a buscar el empate luego de haberse quedado con un hombre menos. Y lo consiguió. Y lo fue a buscar para ganarla, y pudo ganarlo, pero al final se quedó sin nada. Sin la victoria, sin el punto que significaba el empate, quedando un sabor agridulce, sabiendo que se dio todo y no se consiguió nada.

Sorprendió a propios y extraños el comienzo del partido, con un Toco agresivo, saliendo a jugar en campo contrario a pesar del calor y las dimensiones de la cancha. Fueron 20 minutos interesantes los primeros: con una defensa segura, un mediocampo que ganaba los rebotes en el medio y un ataque, con mucha movilidad e inteligencia para desmarcarse. En la primera jugada profunda, Pachu peleó un balón, lo ganó y con un fenomenal derechazo desde afuera del área, marcó el 1-0 que daba la ventaja a los dirigidos por Muszkat. El partido entró en una meseta de paridad: ninguno de los equipos se sacaban ventajas. Hasta que un pelotazo cruzado tomó mal parada a la defensa de Toco y el 11 rival definió con remate bajo y cruzado ante la estirada del Gordo. Con el gol en contra comenzó otro partido: Paranoico comenzó a hacerse más fuerte en el medio campo y Toco no generaba peligro, a pesar de la interesante movilidad de Kiko, nuestro delantero de área, que mostró una versión dinámica, picante y solidaria. Y ese “mini – dominio” se tradujo en el marcador: nuevamente el 11 recoge un rebote en el área y con un precioso tiro, dejó sin chances al Gordo marcando el 1-2. Un golpe duro para el equipo rojinegro que debía buscar fuerzas para conseguir el empate en el segundo tiempo.

En el segundo tiempo El Capi apostó por la velocidad de Eber para intentar empatar el partido y el Pony de Areco mostró toda su velocidad en sus primeras intervenciones. Fue preocupante para toda la defensa contraria y Toco fue, con actitud, en busca del empate. Este ímpetu tan buscado y valorado suele tener efectos contraproducentes: así fue como Mauro perdió los estribos y se fue expulsado por protestar estando amonestado. A pesar del impacto de tener un hombre menos, Toco siguió en su búsqueda frenética por empatar. Y lo logró con un penal sobre Leo, que el Gordo ejecutó siguiendo los manuales básicos del fútbol: penal fuerte, al medio y arriba es gol. Con el empate y los cambios en cancha Toco fue por más. Apostando a alguna escapada de algún volante o delantero, y así, lo tuvo para ganar: desborde de Tute, centro al corazón del área y Berty entrando como una locomotora de Fabricaciones Militares le dio fuerte de derecha, pero el arquero tuvo la atajada de su vida evitando lo que hubiese sido el 3-2.

El juego entró en campo de definiciones luego de esa jugada. Faltaban no más de 10 minutos y desde afuera se sentía la necesidad de, al menos, conseguir el empate. Lo intentó defender Toco, con uñas y dientes, pero llegó la jugada fatal: minuto 39 (vale la pena aclarar que en CITEFA se juegan 40 por tiempo), tiro libre en el borde del área luego de un foul dudoso y un centro traicionero que pasó por medios de todas las piernas para decretar el 2-3 final. Fue un golpe letal, certero, tan injusto como inmerecido. Toco se fue con las manos vacías a pesar de haberse levantado ante tantas adversidades: el 1-2, el hombre de menos y la falta de resto físico. Todo se suplantó con ímpetu y valentía, pero lamentablemente, no volvió a alcanzar, quedándonos injustamente sin nada

La barra, un show aparte. A pesar de la derrota, vale la pena destacar, el continuo apoyo que contó el equipo desde la tribuna. El temible grupo, conocido como “los borrachos del tractor” compuesto por una serie de personajes siniestros entre los que se mezclan alcohólicos, violentos, jugadores lesionados, jugadores suplentes y ex jugadores, volvieron a dejar su marca en los campos de CITEFA. Primero, al alentar en todo momento a sus muchachos, incluso cuando el partido parecía irremontable. Y después para quitar el dramatismo que se intenta instaurar dentro del fútbol: comentarios graciosos, petardos de todo tipo y color, y un fernet novedoso acercado por el Loro. Lamentablemente, los jugadores no pudieron lograr el resultado que querían regalarle a su colorida parcialidad, pero estuvieron a la altura de las circunstancias, recibiendo un cálido aplauso al final del partido, a pesar de la derrota. Seguramente, lo conseguirán el próximo partido y “Los borrachos” estarán presentes para festejar sin parar.

Puntajes.

Gordo. 6. No tuvo mucha intervención porque tampoco fue muy exigido. No pudo hacer nada en ninguno de los tres goles, siendo lo mejor el penal convertido, dando una demostración catedrática de la aplicación de las leyes universales del fútbol para ejecutar un penal.

Cobany. 7. El crédito de Senillosa y Vernet, volvió a tener una actuación acertada. En su nueva versión de un marcador férreo y pocas ambiciones ofensivas, volvió a mostrar muchos puntos a destacar. Su capacidad para anticipar, para no perder la marca y para efectuar cierres oportunos dentro del área, destacándose ese cierre en la boca del arco, que tiró por encima del travesaño, cuando el gol en contra, parecía irreversible.

Leo. 6. Volvió a jugar después de mucho tiempo a raíz de la lesión de Guille. Lo suyo fue correcto, ganando de arriba, estando oportuno para cerrar y cubrir en los costados. Debió haberse ido expulsado luego de meter una fuerte entrada de atrás estando amonestado, pero el árbitro de apiadó de él.

Angel. 6. El hombre de las mil y una noches, que no tiene el estado físico de antaño, volvió a tener una buena actuación. Gano y perdió con el 11 rival, pero se mostró activo para anticipar y pasar al ataque con determinación. Su entrega contagia al resto del equipo.

Luis. 5. Otro que volvió, luego del nacimiento de su primer sobrino, a jugar en el lateral izquierdo. No estuvo mal en la marca aportando lo suyo en ataque, pero falló en dos jugadas claves: en el primer gol le ganaron la posición luego de un pelotazo cruzado y en el tiro libre del final, no pudo despejar la pelota estando en el primer palo.

Tute. 6. Alternó buenas y malas. Mostró algunos desbordes interesantes, ayudó a Toti en el medio, pero a veces estuvo perdido y desaparecido. Lo suyo fue a cuenta gotas. Un buen desborde en el segundo tiempo, casi le da el gol a Berty.

Toti. 6. Intentó, nuevamente, ser el patrón del equipo. Su estampa de jugador fino, bien erguido con cabeza levantada no se tradujo en pases precisos y penetrantes. Lo intentó, pero no estuvo fino como sí lo había estado en el último partido. Es importante que siga en este nivel, aportando la cuota de fútbol al equipo.

Lavezzi. 5. Otro que alternó buenas y malas, pero en definitiva, nunca pudo meterse en el partido. Tuvo algunas intervenciones positivas, pero no fue lo desequilibrante que el puede ser, avanzando por izquierda. Luego, extenuado, salió reemplazado.

Mauro. 4. Su partido no había sido malo hasta que dejó al equipo con 10 hombres por haber exagerado el ímpetu y el afán de ir a buscar todas las pelotas como si fuese la última. Preocupó en el primer tiempo jugando por derecha, el partido estaba para que se afiance, pero nuevamente su fuerte carácter le volvió a jugar una mala pasada.

Kiko. 7. De lo jugadores más inteligentes que mostró el partido. Lo suyo en los primeros 30 minutos fue realmente bueno: pivoteando, mostrándose como alternativa de pase e intentando generar juego desde su posición de centro delantero. Encontró asociaciones interesantes con Pachu y Mauro. En el segundo tiempo sintió el desgaste de tanta movilidad y salió reemplazado.

Pachu. 7. Un buen primer tiempo para este explosivo y desequilibrante delantero. Jugó bien, yendo al fondo, tratando de explotar su velocidad. Lo logró en algunas jugadas y no en otras. Su destello fue el gol que decretó el 1-0 parcial: giró, tomó la pelota de aire y derrotó al arquero con un remate fulminante.

Jimmy. 6. Ingresó por Cobany como marcador de punta derecho. Alternó buenas y malas, mostrándose sólido en la marca. Muestra partido tras partido, que el puesto de lateral le sienta bien, pudiendo ser muy importante para el equipo.

Eber. 7. Explosivo para encarar y desequilibrar. Tuvo tres o cuatro corridas con su sello, que preocuparon a la defensa rival. Le costó cambiar el aire luego de tamaña exigencia física, sumado al calor, le terminaron jugando una mala pasada y se fue desdibujando con el correr de los minutos. Pero lo suyo, es interesante y para aprovechar.

Berty. 6. Entró en su misión de cubrir el andarivel izquierdo, como en sus mejores tiempos. Aportó sacrificio, un poco de juego brusco y un tiro que tenía destino de gol, si no hubiese sido por el arquero rival. Le falta un poco para recuperar su mejor versión, pero va por el buen camino.

Abuelo. 5. Entró como centro delantero y no pudo aportar nada, a pesar de su movilidad. Tuvo algunas pelotas divididas con defensores contrarios, pero no pudo explotar su velocidad para ganarlas.

LA FIGURA DE LA TARDE: El Cobany.

Volvió a mostrar que está en un momento impresionante. Aquel viejo lateral que no se proyectaba ni tampoco marcaba, cambió a esta versión renovada: sabe que su misión es defender y lo hace con de gran manera. Su mejor jugada fue un cierre, en el primer ti

empo, cuando en lugar de meterse con pelota y todo adentro del arco, mostró parte de su magia para tirar la misma por arriba del travesaño. Salió en el entretiempo y se metió en el seno de la hinchada durante la segunda mitad, recibiendo

los elogios de todos los hinchas e intentando explicar su nueva jugada predilecta: el anticipo.